En todos los niveles Canadá es el verdadero lugar para encontrar la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad.
Desde el momento mismo de su creación los estadounidenses siempre se imaginaron que su país sería un faro de oportunidades para el mundo. Thomas Jefferson encendió esa antorcha cuando escribió en la declaración de independencia que todos los hombres tienen derecho a la vida la libertad y la búsqueda de la felicidad.
Esta noción de que todo el mundo merece una oportunidad, y probablemente la encontraría en América, ha sido una de las ideas más atractivas y poderosas de la historia contemporánea, guiando a millones a la isla del progreso en búsqueda de un buen trabajo, una buena educación y una mejor calidad de vida.
Pero donde una vez USA estaba solo como tierra de oportunidades, ahora hay decenas de otros países que han superado la unión americana. El jefe dentro de todos estos, es su vecino del norte: Canadá.
Los canadienses viven 2,5 años más que los estadounidenses, son 6 veces menos propensos a ser encarcelados, y el foro económico mundial clasifica a los canadienses como las 6tas personas más felices del mundo mientras los estadounidenses se quedan atrás con el 13 avo lugar.
Cada aspecto del sueño americano cada vez se encuentra más fácilmente en Canadá. En USA, el 46% de la población ha logrado obtener un título universitario, en Canadá el 59%. Después de la graduación los canadienses tienen más oportunidad de encontrar empleo, con una tasa de empleo 4 puntos mejor. Es más probable que pague una casa sin rejas ni cercas donde las tasas de propiedad de las viviendas son 5% más altas.
Los canadienses tienen más tiempo de disfrutar de sus hogares ya que trabajan 80 horas menos por año y toman un extra de 3 días de vacaciones. Comparado con Canadá, estados Unidos no ni siquiera la tierra de la libertad. El índice de libertad humana del instituto Cato considera que los Canadienses son las sextas personas más libres del mundo, mientras que los estadounidenses están a la saga en el puesto 23, detrás de Polonia.
Reporteros sin fronteras, asociación civil, marca a Canadá en el peldaño 18 por la libertad de prensa. A pesar de su muy albada primera enmienda, USA solo alcanza el puesto #41.
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El sueño americano prometía la igualdad, un campo de juego nivelado donde cada uno podría jugar libremente. Pero eso también es más una cosa Canadiense.
El coeficiente intelectual de Canadá, una medida de la desigualdad económica, ha sido mejor en los últimos 80años. En Canadá tienes el doble de probabilidades de pasar del estatus de los más pobres de la población a los más ricos; del mismo modo el vínculo entre los ingresos de un padre y un niño es la mitad de fuerte que en Canadá.
En prácticamente en todas las medidas, Canadá ha superado a los estados unidos como la ciudad brillante de las colinas, donde todo el mundo puede estar seguro que alcanzaría su potencial y la gente alrededor del mundo lo ha comenzado a notar.
Desde USA los refugiados y solicitantes de asilo lo están haciendo hacia Canadá, esperando una audiencia de inmigración justa y un futuro mejor. En América Latina hay reporte de inmigrantes económicos rumbo al norte, con la intención de cruzar la frontera de los Estados Unidos seguir avanzando hacia Canadá. En el extranjero los estudiantes están eligiendo cada vez a Canadá sobre los Estados Unidos.
Ya sea debido a la geografía o a la historia o tal vez a la política, hemos llegado hasta donde estamos. Todo lo que América alguna vez aspiró a ser a hora lo somos. No solo hemos logrado el legendario sueño americano, estamos entre los seres humanos más seguros, saludables y felices que jamás existieron.
Si somos dolorosamente honestos con nosotros mismos, medimos nuestras vidas en tazas de café y vacaciones en el Caribe. Una nación de suburbios de clase media con sobre peso, molestos porque el impuesto sobre el carbono añada un extra de 5 centavos a nuestro café del Tim Hortoms o un día menos en la playa de Jamaica.
Ninguna generación de Canadienses ha tenido más y ha sido capaz de lograr más que nosotros y ninguna generación ha sido menos ambiciosa. Tenemos Todas las herramientas y toda la oportunidad para hacer grandes cosas y esta complacencia es fomentada por nuestros líderes políticos, pensando en ayudar a la clase media a luchar con un slogan menos ambicioso que “MAke America Grate Again”.
Como el sueño Americano también se ha convertido en Canadiense, también es hora de que también asumamos el papel de tierra de las libertades y abramos aún más nuestras puertas.
El primer ministro Canadiense Sir Wilfrid Laurier declaró: “Canadá será la estrella hacia la cual todos los hombres que aman el progreso y la libertad vendrán”.
Hagamos de este un slogan tan famoso y significativo. El lema del sueño canadiense, cómo lo fue en aquella época.